Una experiencia de diálogo interreligioso preciosa.

Finalmente todo ha ido muy bien. Aunque ha llovido desde las cuatro de la mañana. Finalmente, Joao y yo nos hemos decidido a ir a la mezquita. Nos hemos quitado las sandalias y hemos compartido la oración con los musulmanes de Marandallah.

 

Ha sido muy bonito y emocionante porque nos han dado incluso la palabra y nos han pedido que bendijéramos toda la comunidad musulmana presente, todos los creyentes de Marandallah y todo el pueblo.

Las fotos muestran lo intenso del momento vivido. Para mí ha sido la primera vez, pero creo que me costará olvidarla. 

 

Todos han agradecido enormemente nuestra presencia y solidaridad espiritual. Creo que es el camino que tenemos que recorrer para dar pruebas que los credos nos unen en vez de separarnos. En Dios, todos encontramos una unidad que va más allá de los esfuerzos humanos porque nos basamos en una piedra sagrada, llámese Kaaba o Pierre. Es Dios quien nos mueve y nos une.

 

Ha sido muy bonito y singular.

Que Dios, el Misericordioso, bendiga esta tierra de Marandallah.

Korona.

Fiesta del Aid-Fitr

Hay un sol espectacular en Marandallah. Tod@s se preparan para celebrar la fiesta del Aid-Fitr (o lo que es lo mismo, el final del mes de Ramadán y el comienzo del mes de Chawel).

Joao, Andrés y yo hemos ido a saludar a las autoridades del pueblo para presentarme delante de ellos y desearles una feliz fiesta.

Hemos tenido suerte porque en casa del jefe del cantón estaban su secretario, el jefe del pueblo, su secretario, el cuarto imam de la mezquita, el hijo del jefe del cantón, el jefe de los Senufó y el jefe de un pueblo que está a tres kilómetros de Marandallah.

Después de la salutación de cortesía que hace parte del protocolo de estas tierras. Hemos hablado un poco de la situación de Marandallah en relación a la telefonía móvil y demás cosas.

Cuando ya íbamos a irnos, el jefe del pueblo ha tomado la palabra y ha tenido la iniciativa de invitarnos a la oración que tendrá lugar mañana a las ocho de la mañana en la mezquita. Ha sido un gesto que nos ha sorprendido porque es la primera vez que tienen una iniciativa de este género. Han dicho que saben que mañana es domingo y que nosotros también tenemos que hacer nuestra oración pero que estarían contentos si podemos estar al lado de ellos.

Yo, mañana, tengo que ir a una aldea que está a unos 12 km de aquí pero pienso hacer lo imposible por honrar la invitación que nos han hecho porque me parece un bonito gesto y un paso adelante en este diálogo interreligioso que queremos ir concretizando poco a poco en el norte de Costa de Marfil.

Después fuimos a visitar al imam principal de Marandallah que nos recibió muy bien y constatamos que tiene dos fotos colgadas en la pared, una con Flavio y Stefano; y otra con Martín y Stefano.

Se puso muy contento por nuestra visita y nos deseó toda clase de bendiciones.

Estoy convencido que el diálogo interreligioso lo marcan estos       pequeños gestos de cercanía y vecindad.

Ya os contaré cómo irá mañana.

Buena fiesta de Aid-Fitr a tod@s.

Korona

Nueva misión: Marandallah

Sí, hace demasiado tiempo que no doy señales de vida. Estas últimas semanas han sido muy intensas. Finalmente llegó mi destinación y el tiempo de irme de Dianra. El sábado, 11 de agosto salí de Dianra y el domingo, 12, llegué a Marandallah con todos mis bártulos y tres ATS y un enfermero que tenían que participar a una sesión de formación sobre la salud.

La Consolata ha querido rizar el rizo y me ha pedido que haga lo que hasta ahora era el compromiso del Hermano Rombaut, la administración del Centro de Salud y la Maternidad de Marandallah y del dispensario de Dianra Village. Hay 67 km de pista de distancia entre los dos. El primero tiene unos 20 trabajadores entre médico, enfermeros, ATS... y el otro, sólo cuatro.

Ahora llevo una semana con Rombaut ya que me está explicando el funcionamiento del Centro que empezó en 2007 y que ahora está habilitado para hacer los tests de VIH y el seguimiento de los seropositivos. Me parece que es un reto (y una misión) preciosos que el Buen Dios me propone para estos próximos años. A todo esto se une una comunidad "conocida", con Joao y André Nekpala y el nuevo reto de aprender una nueva lengua: el diula para dar pasos hacia el diálogo interreligioso.

No sé, muchas expectativas: salud, encarnación, diálogo, nuevos horizontes, fraternidad...

Cuando esté un poquito más metido ya os mandaré algunas fotos. Rezad para que sepa estar a la altura de lo que me pide la Consolata ene sta nueva etapa de mi vida.

Bsks y abrazos.

Koroná.